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jueves, 6 de julio de 2017

12 - Festividades Cristianas



Festividades Cristianas


Cuando el cristianismo se difundió entre los romanos, que no sabían nada del judaísmo pero mucho sobre sus propias costumbres  paganas, el nuevo credo adaptó a sus propios fines las costumbres romanas.


Los mejores ejemplos de flexibilidad para adaptación e incorporación al culto de costumbres paganas tal vez sean festividades religiosas como la Navidad y la Pascua de Resurrección.

Fiestas saturnales en el Imperio Romano
Los romanos consagraban el 25 de diciembre a Saturno, padre de los dioses y dios de la agricultura, y las celebraciones recibían el nombre de saturnales. Por esa fecha, todos los años el sol del medio día detiene su descenso hacia el Sur y comienza su lento retorno hacia el Norte, y se celebraba el nacimiento del sol, al tener la certeza de que  el invierno terminaría y de que la primavera regresaría. Durante las saturnales, del 16 al 25 de diciembre, había fiestas y banquetes, el vino se repartía generosamente, y se acostumbraba intercambiar regalos. Las costumbres se relajaban y hasta a los esclavos se les permitía participar en las festividades. Esta época del año era celebrada  también por otras religiones. El mitraísmo por ejemplo, un culto oriental que fue el principal competidor del cristianismo durante un par de siglos, celebraba el 25 de diciembre como su principal festividad. Los cristianos sabían que el atractivo de estas festividades era irresistible para el pueblo, y en vez de luchar contra ellas, las adaptaron a sus creencias dándoles un nuevo uso. Puesto que los Evangelios no dicen exactamente cuando nació Jesús, su natalicio se lo podía ubicar en el 25 de diciembre tanto como en cualquier otra fecha. Esta fecha fue adoptada por la Iglesia en el siglo IV (entre los años 354 y 360) y se convirtió en la Navidad. Su celebración subsiste hasta hoy, y la fiesta de Navidad aún hoy tiene algo de las características y costumbres de las antiguas saturnales romanas.

La fiesta de la Resurrección de Jesús se empezó a celebrar durante la Pascua, que es llamada también Pascua florida por transcurrir en la época del florecimiento de las plantas. Pero esta festividad no tiene una fecha fija como debería corresponder a una celebración onomástica, pues la resurrección de Jesús debió acontecer en un día determinado del año, sino que depende del calendario lunar y se celebra el primer domingo después de la luna llena siguiente al equinoccio de primavera, haciéndola coincidir con la Pascua judía, fecha en que los hebreos celebraban el fin de su éxodo desde el año 621 a.C., y también coincidía con la conmemoración romana de la resurrección anual de Adonis, dios solar agrario, que resucitaba junto con la naturaleza al llegar la primavera y terminar el invierno. Durante esta conmemoración tenía lugar la costumbre ritual, extendida entre los pueblos antiguos, de regalarse unos a otros “huevos de Pascua”. La Iglesia, no pudiendo eliminar esta fiesta pagana por su gran popularidad, se la apropió y la convirtió en la Pascua de Resurrección.
  Las representaciones paganas se cristianizaron. Representaciones de Isis con su hijo Horus y de María con Jesús.

La fiesta de la llegada de los Reyes Magos, el 6 de enero, se estableció para cristianizar una festividad de la Ciudad de Alejandría en Egipto, segunda ciudad en importancia del Imperio Romano. Ese día se celebraba el festival de la Doncella Core, identificada con la diosa Isis, y el nacimiento de su hijo Aion, identificado con Osiris. Desde hacía milenios, la aparición de la estrella Sirio en el horizonte del amanecer anunciaba el desbordamiento de las aguas del río Nilo con las que el dios resucitado Osiris fertilizaba y daba nueva vida a todo el valle del Nilo.

Otra fiesta que los cristianos adaptaron y que también existe en nuestros días, es el 29 de junio, día de San Pedro y San Pablo, fecha en la que en el Imperio Romano había grandes celebraciones en honor de Rómulo, fundador de Roma. Esta fiesta la  celebraban los cristianos romanos con pompa y procesiones, costumbres que aún existen en varias regiones del mundo.

En nuestra época, son pocas las personas que conocen los orígenes paganos de  nuestras festividades cristianas.



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